Para Katy Perry las cosas no van del todo bien, y es que la cantante tendrá que pagar una fuerte suma por una demanda en la que es acusada nada más y nada menos que de plagio. Aparentemente la intérprete de “Roar” y su equipo habrían copiado la música de un rap cristiano para su tema “Dark Horse”. La cifra por la querella legal asciende a 2.78 millones de dólares.
Según informaron medios de comunicación locales, la artista tendrá que desembolsar la fuerte suma de 550 mil dólares de su bolsillo, mientras que el resto será pagado por su sello discográco, Capitol Records, y otros colaboradores.
La suma se destinará a compensar al cantante Marcus Gray, quien bajo el alias de Flame se especializó en el rap de temática cristiana y denunció en 2014 tanto a Perry como a su equipo creativo por presuntamente haber plagiado su canción «Joyful Noise».
Esta canción fue incluida en el disco «Our World: Redeemed» (2008) de Flame, tiene un ritmo y una base muy similares al éxito de Perry «Dark Horse», tanto que el rapero estadounidense decidió llevar a la estrella del pop ante los tribunales.
El artista reclamó en su demanda que, de considerarse un plagio, tenía derecho a recibir los benecios logrados por el tema de Perry, que se estimaron en unos 40 millones de dólares.
Pero la defensa de la estrella argumentó que habría que restar a esa cantidad los costes de producción, grabación y explotación, entre otros.
Finalmente, el jurado de Los Ángeles estimó la compensación en 2.78 millones de dólares, tras considerar a principios de esta semana que efectivamente se produjo un plagio.
El tema denunciado, «Dark Horse», que formó parte del disco Prism (2013) y que contó con Juice J como invitado, es uno de los grandes éxitos de la carrera de Perry y su videoclip, inspirado en el antiguo Egipto, acumula más de 2.600 millones de reproducciones en YouTube.