Italia está analizando tres opciones que van desde retirar a Autostrade per l’Italia toda su concesión de autopistas hasta multar a la concesionaria encargada del puente que se derrumbó esta semana en Génova, dijo un viceministro italiano.
“Las opciones que estamos analizando son la revocación completa, la revocación de solo la parte de la A10 o una multa, pero una multa de 150 millones de euros es demasiado baja”, dijo en entrevista telefónica el viceministro de Transporte, Edoardo Rixi.
Autostrade per l’Italia, propiedad de Atlantia, opera la autopista A10 que conecta la frontera francesa con la ciudad noroccidental de Génova, donde un puente se derrumbó el martes matando al menos a 39 personas.
Según los términos de la concesión, Autostra de puede estar sujeta a una multa de hasta 150 millones de euros.
Por: MVS